Page:Journal of American Folklore vol. 31.djvu/411

From Wikisource
Jump to navigation Jump to search
This page has been proofread, but needs to be validated.
Porto-Rican Folk-Lore.
401

197 (a).

En Belén de Judea
nació Jesucristo,
los magos benditos
en Él se recrean.
Fueron a la aldea
para que lo crean;
según lo decían
el rey que nacía
era el Redentor.
Si es el Salvador
ven acá, alma mía.[1]

Venían los magos
o sabios de Oriente
a adorar al Niño
muy resplandeciente.
Una estrella ardiente
les sirve de guía,
para que María
se fijara al cielo.
Para tu consuelo
ven acá, alma mia.

Pasaron los magos
por casa de Herodes;
él los ha parado
para estas razones.
Y sin dilaciones
dijo que quería
poder encontrarle
para ir a adorarle;
ven acá, alma mía.

Vengo a recordarle
a aquel rey Herodes
que mandó matar
los niños rabones.
Oigan mis razones
hoy en este día
que lo que decía
son cosas sagradas;
oigan mis palabras,
ven acá, alma mía.

Entonces Herodes
estaba aterrado;
él llamó a los magos
que eran tres señores;
y los sacerdotes
dirigen también
las nuevas de ver
de que había nacido
en campo florido
el Dios de Israel.

Herodes enfurecido,
lleno de ironía,
con idolatria,
persigue al nacido;
le ha llamado el Cristo
con mucho poder.
Pudo acontecer
que un ángel le dijo:
— Llevaran consigo
al Dios de Israel.

Un ángel le dijo
que estarían allí;
entonces por fin
tomando prodigio
José y Dios divino,
sagrado ha de ser,
caudillo ha de ser
de todo el linage;
bendecid la sangre
del Dios de Israel.

San José y María
al saber las nuevas,
salen de esas tierras
al rayar el día,
llevando por guía
la estrella que fué
salida en Belén,
señal del profeta;
adoren en esto
al Dios de Israel.

198.

Dentro de un pesebre
todo desarmando
nació el Rey del cielo
que es el facultado.
El que el ser le ha dado
a toda criatura
de mujer ninguna
se ha visto nacer
otro como El.
Gloria en las alturas.

VOL. 31. — NO. 121. — 26,.

  1. One verse too many.